Las cláusulas abusivas en las hipotecas
Voy a tratar sobre las cláusulas abusivas más utilizadas en la contratación bancaria, son las que de manera más habitual puede encontrarse el cliente bancario en su hipoteca.
Las cláusulas abusivas son parte integrante de casi la totalidad de las hipotecas, por diversos motivos nuestro más alto tribunal y el TJUE las han ido declarando nulas.
Estas son las cláusulas abusivas más conocidas:
- Cláusula suelo o de interés mínimo.
- Cláusula de gastos de formalización.
- Cláusula de comisión de apertura.
- Cálculo del interés con redondeo al alza.
- Comisión de posiciones deudoras.
- Cláusula de vencimiento anticipado.
- Cláusula de interés de demora.
- Cláusula de fiadores.
Esta lista de cláusulas que pueden ser declaradas nulas por nuestros tribunales, no es exhaustiva, otras estipulaciones cuya validez se cuestiona siguen a día de hoy en el TJUE, nos referimos, por ejemplo, a la del IRPH, de la que se espera sentencia en los próximos meses, o, sobre el tema de las novaciones de las cláusulas suelo, que, si bien, no es una cláusula, deriva de la de interés mínimo.
Contra todas ellas existen sólidos argumentos jurídicos que permiten conseguir su nulidad.
La mayor parte de ellos podemos extraerlos del Texto Refundido de la Ley General de Defensa de Consumidores y Usuarios, también de su predecesora, del Código Civil, de la Ley de Condiciones Generales de la Contratación, y de diversas normas y órdenes que regulan la contratación bancaria.
Sin olvidarnos de la importantísima Directiva europea 13/93/CEE, cuyo articulado ha dado forma a la protección del consumidor en los países de la unión.
La jurisprudencia también ha hecho mucho para fijar la interpretación correcta de las normas de defensa de los consumidores.
Dos importantes sentencias del Tribunal Supremo, mayo de 2013 y diciembre de 2015, son citadas constantemente en las demandas por cláusula suelo y gastos de hipoteca.
Si bien la última ha tenido que ser aclarada, en especial, en el tema del Impuesto de Actos Jurídicos documentados, lamentablemente, la aclaración ha sido un espectáculo mediático que ha dañado la imagen de nuestro más alto tribunal.